domingo, 9 de septiembre de 2007

Coprocracia: Un neologísmo que explica nuestro sistema de gobierno.

Quienes me conocen saben que no suelo hablar de política, así que este post es todo lo que voy a decir sobre el tema. Siéntanse con derecho a discutirlo y agregar comentarios, si les parece razonable.

El título no le sonará extraño a los eruditos estudiosos de la lengua griega, pero para los no iniciados, les desarrollo el significado del término: Viene del griego "copro" (excremento) y también del griego "cratos" (poder o gobierno). Creo que queda bastante bien ilustrado de esta manera, y ya ven de qué se trata este post. No me atribuyo el acuñado del término, porque no lo inventé yo, pero como resulta extrañamente aplicable a este caso, no pude dejar que pasara desapercibido.

Tengo que decir, antes que nada, que soy apolítico, o sea, no tengo preferencia política o ideales políticos específicos, por lo menos en lo que respecta a política partidaria. Tampoco puedo decir que soy anarquista, dado que es necesario algo de órden y equilibrio para poder funcionar, y mis amigos anarquistas son extremistas por definición. Mis ideales están relacionados con el bienestar general, el trabajo y la paz, conceptos que no tienen nada que ver con la política partidaria, tal como yo la entiendo. Si bien el concepto de política (en forma general) es más o menos "criterio o directriz de acción elegida como guía en el proceso de toma de decisiones al poner en práctica o ejecutar las estrategias, programas y proyectos específicos del nivel institucional", en lo que respecta a gobierno y política partidaria, considero que la política es el arte de engañar a las masas haciéndoles creer que pueden decidir el curso del gobierno y del país mediante el "derecho" al voto (aunque por ahí leí una definición que talvés se acerca más a la realidad y de hecho es más elegante: "Conflicto de intereses disfrazados de lucha de principios. Manejo de los intereses públicos en provecho privado.").

En mi país, el "derecho" al voto (una de esas mentiras que intentan inculcarle a los pobres niños en la escuela y el liceo) no es tal cosa, sino que es una "obligación". Hay quienes hasta se emocionan cuando evocan conceptos como "los derechos cívicos del ciudadano", algo que se me hace extremádamente gracioso, dado que en realidad, varios de esos "derechos" no son más que obligaciones disfrazadas, y la emoción que los embarga está más relacionada con el sentimiento de responsabilidad y deber para con su país, que con el bienestar público en sí mismo, una especie de "el medio es más importante que el fin". Votamos porque así nos lo exige la ley, so pena de tener que pagar multas y sufrir toda clase de vejámenes de parte de la clase "gobierno-política-empleado-pública" (toda una casta en sí misma, mayormente formada por individuos a los cuales les pagamos el sueldo entre todos para que nos traten como basura, salvando rarísimas excepciones). Cabe agregar que si Usted, quien en este momento está leyendo este post, es actualmente empleado público (excluyendo al sector "político", claro está, ya que los considero una calaña de inaceptable excepcionalidad) y se siente agraviado por este comentario, es porque se considera parte de la mayoría de dicha casta, y no se considera parte de las rarísimas excepciones (si no eres parte de la solución, eres parte del problema), con lo cual hágase acreedor de mi más sincero y acérrimo repudio. De lo contrario, dicho comentario no está destinado a Usted, y sepa que le aprecio por ser diferente, y además, comparto su dolor al sufrir la incomprensión de sus compañeros y le invito a seguir luchando en contra de esa mayoría con la que tiene que lidiar diariamente y que a veces hace que se generalice injústamente y se lo trate como parte de la misma, la cual es odiada por el resto de nosotros. Conozco varias de estas excepciones, y vaya con ellos mi más sincero respeto y agradecimiento por seguir haciendo la diferencia.

Volviendo al tema central de este post, quien crea que "ejerce su derecho al voto" en este país, está definitivamente equivocado. Incluso, existen trampas hábilmente diseñadas para que aunque uno vote "en blanco", esos votos terminen engrosando la cuenta del que más votos obtenga, cosa que es mas o menos como "votar al que gane y darle más poder de representación". Y por ahí hay quienes dicen que si se vota anulado (mi forma de voto preferida), en realidad se perjudica a algún sector en desventaja, razonamiento sin sentido y que en realidad debe haber surgido del FUD (Fear, Uncertainty and Doubt = Miedo, Incertidumbre y Duda, un acrónimo asociado a las mentiras que suele publicar Microsoft para influir en las decisiones del público consumidor, haciéndoles creer que en el campo de la informática, solo ellos son confiables, buenos y seguros, excluyendo a todo otro competidor, aunque en este caso lo uso como analogía a lo que hace la clase política) que suelen difundir los "actores políticos" (me encanta esa definición, porque es la que más se ajusta a la realidad subyacente: el "teatro político") entre sus seguidores.

Sabemos que no existe un sistema perfecto. Desde la época de los Griegos, lo más cercano a algo funcional es la "Democracia". Este concepto les dá la libertad a las minorías de quejarse y de ser de alguna forma representadas (aunque en la práctica, dicha representación no sea útil), y le dá la "ilusión" a la mayoría de los votantes de que están ejerciendo sus derechos y de que los representantes que votaron van a hacer todo para defenderlos y para hacer cumplir los designios de dicha masa "ganadora". Fué, es y sigue siendo el mejor método, por más que se lo critique (este post no es una crítica a la Democracia en sí misma, sino a la situación actual resultante de la aplicación de la misma por individuos que no la practican en realidad).

La realidad es que existen conceptos como "costo político", "disciplina partidaria", "coherencia ideológica", etc., que se conjuran entre la clase gobernante como razones de peso para no cumplir con dichos designios. Es algo así como una serie de excusas razonables (como darle al dueño de la empresa en la que uno está empleado ésta excusa por llegar tarde: "Che, llegué tarde porque a mi madre la atropelló un barco en 18 de Julio y Aparicio Saravia, y tuve que llevarla a la Cruz Roja porque no tiene sociedad, porque no la pudo pagar este mes, porque no pudo ir a cobrar el cheque del Banco Transatlántico que le dieron en el B.P.S. cuando fue a cobrar la jubilación esta semana...", ¿se entiende la idea?) que se dan para no hacer lo que se prometió hacer en un principio. También hay otros conceptos que entran en juego, pero que son demasiados complejos como para tratarlos en este post, como "el amiguismo", "el clientelismo político", "la economía partidaria" (no quiero irme por las ramas más de lo necesario ni tener que explicar a fondo estos complicadísimos conceptos que parecen pasar desapercibidos para la gran mayoría ;-) ), pero que también influyen y no de forma supérflua, como cabría esperarse.

Tengo que aclarar que estos conceptos no son propios de nuestro país, sino que son generales a nivel mundial para toda clase política (salvo algunos grandes hombres y mujeres notables y que puede considerarse que son parte de una raza en lamentable extinción), no vayan a pensar que solo se trata de un "uruguayismo", o que yo solamente veo el problema con una óptica reducida y cerrada. No quisiera citar a ese gran país norteño, cuya historia (antigua y reciente) está sembrada de ejemplos de todos estos conceptos también. Lo que trato de decir es que en general, eso se dá en todas partes del mundo, no solo acá, aunque evidentemente, por haber nacido en esta pequeña parte del planeta, solo tengo este humilde ejemplo cercano.
En definitiva, lo que quiero de alguna manera expresar a través de este post, por si no ha quedado del todo claro ("a buen entededor..."), es que hemos estado siendo gobernados por un hato de voraces buitres, mercaderes e ignorantes, disfrazados de benefactores, idealistas y héroes. No hablo de ciertos sectores políticos, ni de partidos específicos, ni de épocas específicas, sino de TODO y TODOS. El poder corrompe indefectible e inevitablemente. Nadie va a hacer lo que realmente hay que hacer para solucionar el problema, y nadie va a arriesgarse por los "ideales" por los que realmente debería arriesgarse, que son el bienestar general, el trabajo y la paz (MIS ideales en definitiva).

Es por eso que la Democracia no funciona, o digámoslo de otra manera, la Democracia no existe en nuestro país. Se trata de una Coprocracia, o sea, léanlo e interprétenlo como les parezca, tanto sea "gobierno de mierda", o "mierda del gobierno", o "la mierda nos gobierna", cualquier combinación en todas sus acepciones posibles está bien.

Calculo que va a haber gente herida por ahí por este post, sobre todo los idealistas intelectuales, y los que aún hoy siguen añorando épocas mejores, el maracanazo y la Suiza de américa. El resto, va a hacer lo que hago yo, emitir una ligera carcajada cínica y seguir haciendo lo mismo de siempre. Levantarse temprano, ir a trabajar hasta que anochezca y hacer la mejor vida que le permita la economía a la que pueda acceder. No puedo decir que perdí la esperanza, porque de hecho, nunca la tuve. Sería hipócrita de mi parte decirles semejante cosa.

Lo único que anhelo es vivir feliz y sin tener que preocuparme por lo que dicen y hacen nuestros "amigos" políticos. De eso, que se preocupen los votantes, yo voy a seguir poniendo papel higiénico en el sobre de votación, cada vez que me toque. Seguro no arreglo nada con eso (que no se entienda como que estoy "sacándole el culo a la jeringa", o que "no voto para que no digan que tengo la culpa", es tan solo que ya estoy convencido de que no es realmente útil), así que por lo menos me libro de la multa y no alimento esa mentira ridícula de la Democracia, el idealismo y el bienestar social.

Debe ser que estoy muy ocupado sobreviviendo como para preocuparme por valores y conceptos tan nobles y altos.

3 comentarios:

GDataSoft dijo...

Excelente artículo. Lo voy a difundir entre mis contactos. La idea está muy bien desarrollada sin ambientar exageraciones de especie alguna.

Anónimo dijo...

Ya habia leido este articulo tuyo hace algun tiempo y coincido con Julio en que es excelente.
Acepto tu determinacion y me parece una decision muy centrada y coherente con la forma de ver, pensar y actuar que tenes (condicion que reafirmo por que te conozco personalmente).
Como dije en mi articulo, agradezco que haya gente que como vos plantee puntos de vista diferentes con argumentos tan claros y contundentes como habitualmente haces.
Un abrazo

vicente moirón moya dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
 
Gustavo Castro

Crea tu insignia