domingo, 20 de enero de 2008

Desvaríos de un inhumano

Hace tiempo que medito sobre ciertas cosas que pasan en el mundo.

Vivimos en tiempos extraños, donde la tecnología desterró finalmente a la magia, donde los milagros científicos deslumbran hasta al más incrédulo y donde la información puede viajar en forma instantánea de un punto al otro del planeta, pero también donde seguimos siendo nuestros propios peores enemigos, donde el poder se concentra en unos pocos individuos incorrectos y donde incluso hay personas que viven orgullosas de ser la escoria de su género.

Dejamos atrás las batallas abiertas para dejar paso a las guerras frías y a las sinuosidades y estrategias que buscan convencer por el método del absurdo de que el mundo necesita ser protegido, aunque en realidad el verdadero motivo es el enriquecimiento de grupos económicos a quienes en realidad no les hace falta dicha riqueza.

Seguimos viviendo en un mundo donde a pesar de lo que se diga, todavía te pueden "desaparecer" por pensar, sentir o decir cosas que no concuerdan con los conceptos que se desea que predominen, no en las grandes masas, sino en los pequeños grupos de poder.

Seguimos mintiendo e intentando aventajar a los demás, y recurrimos a toda clase de artimañas más allá de lo imaginable, hasta llegar al corazón mismo de la bajeza humana, donde solo queda lo que nos sigue diferenciando del resto de los animales que viven en el planeta, no el raciocinio, sino la codicia. Ya no se trata del hambre de las masas, sino de la gula de los individuos.

El hombre es el único ser que atenta contra su propia especie por motivos que casi siempre tienen poco que ver con su propia supervivencia. Se puede llegar a justificar el hacer daño a otro aduciendo auto-defensa, pero el hombre vá más allá de eso. Se justifica cualquier desastre en pro del bien de algunos y siempre en contra de otros, nunca jamás de común acuerdo. Los defensores defienden al mejor postor, que gana siempre. Palabras como "ilegal", "inconstitucional", "corrupto" e "inmoral" descansan en los anaqueles de la ignorancia y el olvido, donde ya perdieron el sentido y sus sonidos ya no despiertan emociones acaloradas.

Las decisiones impactantes se toman en grupos pequeños que casi siempre acuden a la violencia o algún otro método igualmente execrable para imponer sus intereses, dependiendo de su grado de intelectualidad y de la amplitud de su accionar. En los círculos de menor importancia, la violencia es el arma, en los de mayor importancia, lo es la economía. Hasta se ha creado un arte dedicado a convencer a las mayorías de que dichas decisiones son para el bien común. No existe la libertad, ni las garantías, ni los derechos y el secreto de la supervivencia está en no darse cuenta.

La codicia hace que un descubrimiento científico que puede salvar vidas sea vedado al mundo en pro de la obtención de lucro. Patentamos enfermedades, descubrimientos médicos y hasta genes para evitar que otros nos roben una parte de las ganancias que obtendremos al explotar las curas, los avances y los secretos que obtengamos de ellos. También destruímos cualquier aparición que potencialmente pueda representar un riesgo para la hegemonía que ostentamos, sin importar si es mejor en cualquier sentido. Nos hemos vuelto voraces antropófagos carentes de sentido de dignidad, igualdad y respeto por nuestro propio género.

Los que menos, se alimentan solo de la envidia, porque carecen de los medios para lograr objetivos más altos que sus propias cabezas, simplemente porque se los negaron a sí mismos al decidir la vía simple y fácil que los envidiados no quisieron aceptar, y rumian su desgracia y le echan la culpa al mundo que los rodea, sin darse cuenta de que ellos mismos son el resultado de sus decisiones equivocadas, no de la suerte ni del destino. Caen a los pies de la droga, el alcohol y el descontrol, y simulan disfrutar despreocupadamente del ambiente de la fiesta, hasta que algún golpe los llama a la realidad inmutable de la que tanto reniegan y de la que no tienen el valor de finalmente escapar.

Y los hay que se sienten orgullosos de formar parte de grupos marginales, que dicen no ser entendidos y pelean contra sí mismos y contra el resto, buscando resaltar en la otra punta de la escala, consumiendo mentiras y construyendo bajezas, porque es lo único que controlan en su idealizado mundo corto de vista. Sus grupos mantienen la coherencia y funcionalidad de las manadas de animales carroñeros y los rije el mismo consumismo que se aplica a otros individuos superiores, aunque sus medios y recursos se obtienen de forma distinta. Si uno separa a uno de estos seres de la manada, hasta puede demostrar poseer una filosofía y unas creencias dignas de otros seres de carácter más elevado, pero cuando se lo devuelve al conjunto, se vuelve tán elemental como el animal del que realmente forma parte.

Se escuchan las quejas, las amenazas y los gruñidos de los perdidos, ocupados en "rescatarse", mientras el resto mira para otro lado o cierra los ojos, deseando no convertirse en estadística. Las soluciones existen, pero preferimos malgastar los recursos en excesos, cambios de imagen e innecesarios e injustificados liftings, antes que hacer lo que realmente hay que hacer para terminar con los problemas que afectan a nuestros vecinos, que por ser nosotros vecinos de ellos, también nos convertimos en las víctimas que ellos son sin darnos cuenta. Y no estoy hablando de otros países, sino de nuestro barrio, nuestra propia casa, la habitación donde ahora estoy sentado escribiendo esto...

No me hagan caso...

Esto es tan solo la catársis de un idiota que se despierta algunas noches de una pesadilla donde tiene las manos ensangrentadas y sucias de las visceras de un monstruo sin cabeza, pero con forma de rascacielo de aluminio y cristal, ahogándose en una laguna de cables rotos y ruedas dentadas que están tán herrumbradas y corroídas que apenas giran, en un silencio ensordecedor donde apenas un latido débil, de cadencia irregular se escucha de vez en cuando en el corazón de la bestia de la que intenta escapar, sin lograrlo. Afuera, los animales huyen y las plantas se marchitan mientras tentáculos de acero manchados de excremento se retuercen tratando de alcanzarlos.

No voy al psicólogo a contarle estas cosas, porque no tiene sentido. Sé lo que significa y lamento formar parte de "eso". Estoy seguro de pertenecer a una raza en decadencia y talvés este desvarío es mi mejor forma de lidiar con ello. Me debato entre la vergüenza y el dolor de entender lo que somos en realidad y me doy cuenta de que yo también soy igual, incluso en las cosas más simples, lo cual no deja de ser irónico, ya que se supone que uno debe conocer y aceptar el problema para poder resolverlo, y aún a pesar de entender y saber, mis sentimientos al respecto son tán variables que muchas veces afectan a mi juicio y me hacen comportar como eso que odio y que desearía que no existiera.

Y es inútil buscar una solución lógica y fácil. A pesar de no querer aceptarlo y que dentro de mí siento que ese es un derrotero cruel, creo que por más que mi raciocinio intente aflorar y esconder el mal que sé que habita en mi y en todos nosotros, es imposible. Puedo escucharlo rugir en mis sienes y puedo verlo cuando mis ojos se nublan por la ira, puedo olerlo y saborearlo en la sangre. Los sumerios decían que es culpa de Kingú, el Dios loco y malvado de cuya sangre fuimos creados los humanos, cuando Marduk destruyó el ejército de Tiamat, quien quería imponer de nuevo el caos en el universo.

Solo nos queda la extinción, el único evento capaz de despertar los sentimientos necesarios para hacernos perder la parte que nos separa de los animales, aunque sea por unos segundos. Nadie en su sano juicio puede decir que no nos la merecemos.

El temor a enfrentarnos al fin definitivo nos puede hacer ver las cosas de la manera correcta. Lo sentí en ese sueño y lo entendí. Puedo ver las sombras aéreas en la oscuridad cada noche y puedo sentir el vacío y la soledad que representan. No vienen a pedir, ni a advertirme sobre nada, tan solo me ven con tristeza porque saben lo que sé y se lamentan como yo y porque saben que no tiene sentido intentar hacer algo al respecto.

La ignorancia es la dicha y lamento haberme dado cuenta ahora, que ya sé porqué.


Ahora que lo dije, me siento mucho mejor.

viernes, 18 de enero de 2008

Un bug persistente del IE...

Hace unos días tuve que echar mano a un desarrollo web que había tercerizado y que al final la persona a quien se lo había asignado no pudo seguir, así que (como casi siempre), tuve que retomarlo...

El software en cuestión consta (entre otras cosas) de una interfaz de búsqueda guiada, la cual decidí desarrollar usando AJAX (NO confundir con la marca AJAX competidora de ACME en los dibujos animados...), dado que el volumen de datos a cargar del servidor no era demasiada, y además quería que fuera lo más dinámica posible y rápida para el usuario.

La idea era declarar unos objetos SELECT y luego cargarles dinámicamente objetos OPTION con los valores apropiados. Normalmente, este tipo de acciones se puede lograr en Internet Explorer asignando el contenido de responseText del objeto AJAX (el cual debería contener un conjunto de objetos OPTION generados a partir de un script en el servidor) a la propiedad innerHTML del objeto SELECT, haciendo que este cargue dichos OPTIONs como si fueran hijos.

La idea ya había sido explorada por el anterior programador con un propósito similar en una pantalla donde se deberían cargar datos en forma dinámica, aunque cuando intentó ejecutar su idea en Internet Explorer, la implementación no funcionó. El código funcionaba en Firefox y amigos, pero la "fat E" se negaba a funcionar.

Cabe agregar a esto, que la propiedad innerHTML es un puro invento de Micro$oft, no aceptado por la W3C, que en realidad exige utilizar las funciones createElement() y appendChild() para estos menesteres, las cuales están definidas en el DOM

Lo gracioso de esto es que el código que funcionaba en Firefox NO es el que la W3C considera válido, sino que era el código que Micro$oft había diseñado como contrapartida a usar las funciones definidas en el DOM, lo cual significa que la solución que usa innerHTML ¡solo fallaba en Micro$oft Internet Explorer!.

No es la primera vez que Micro$oft hace incompatible (ya sea por error o deliberadamente) alguna función con sus propios productos. Solo hace falta recordar como le sacaron a la continuación del "Write" de Windows 3.X (el infame "Wordpad") la opción de justificación distribuida de texto (un atentando directo a los usuarios para que compraran el Word y así dejen de hacer sus cartas con Wordpad...), o cuando inventaron FAT32, que Windows NT 4.x era incapaz de leer y/o escribir...

El bug está documentado desde la versión 5 de IE, y hasta ahora (versión 7, y casi 5 años después), M$ no lo ha resuelto.

(No sé de qué carajo me sorprendo en realidad...)

Aüf Wiedersehen!

jueves, 17 de enero de 2008

La culpa es del enlace internacional...

Y si... obviamente, nunca es culpa de AntelData que se caigan los ADSL. ¿No es obvio acaso?

Un sábado a la tarde, hace mas o menos 7 años, cuando trabajaba como sysadmin en un conocido ISP, me llamaron para avisarme que había problemas con algunos servicios. Junto con el NetAdmin diagnosticamos el problema, el cual resultó ser un corte en el enlace internacional de AntelData. Hasta ahí estamos de acuerdo y SI, fué culpa de "algo" que unía nuestra red con el resto de Internet, en algún punto de la red de nuestro proveedor de upstream (AntelData, obviamente).

Cuando el asunto volvió a la normalidad un par de horas después, AntelData emitió un comunicado que decía algo así como que una topadora accidentalmente había cortado un cable de fibra mientras se realizaban trabajos en la vía pública y que hubo que realizar un complicado enrutamiento alternativo para poder restaurar el servicio.

Casualmente, el viernes antes de irme a casa yo había puesto en ejecución un programa que estaba recabando datos de una prueba de tráfico sobre el enlace de un importante cliente, quien utilizaría dicho enlace para comunicarse en forma directa con su casa matriz en Alemania. El programa básicamente almacenaba datos de latencia del enlace bajo carga discreta a cada uno de los routers que estaban en el camino hacia la casa matriz del cliente, así que yo conocía con exactitud las rutas utilizadas y el estado del enlace internacional (el cual todos los proveedores compartían en ese momento, dado que era provisto solamente por AntelData, salvando casos excepcionales).

Mi sorpresa fué mayúscula cuando revisando los datos (que creí inútiles dado el famoso cambio en el ruteo), me dí cuenta de que en realidad, cuando el problema fué resuelto, las rutas seguían siendo exactamente las mismas que antes del problema, lo cual dá por tierra con el argumento de AntelData acerca de su ruteo alternativo...

¿Qué fué lo que pasó exactamente? Nunca lo sabremos. Pero lo que sí sabemos es que el ruteo alternativo nunca sucedió. Y hasta donde sé, la topadora y el cable de fibra nunca existieron tampoco. Lo más probable es que la limpiadora de los fines de semana pasara con la aspiradora y arrancara algún cable conectado a quien sabe qué aparato lleno de luces (un switch, un router, una UPS, las opciones abundan...) y todo se viniera abajo como consecuencia de dicho asunto. Naturalmente que cuando los técnicos se enteraron del problema (una hora y media después, probablemente), empezaron a buscar la falla y no dieron con nada hasta que a alguien se le ocurrió revisar los conectores (¿a quien se le ocurriría buscar ahí de todas maneras?) y bueno, enchufaron el cable y todo volvió a la normalidad. Y para minimizar el asunto y desviar la atención pública, dijeron que el problema había sido una topadora que cortó un cable de fibra... (es altamente probable que la empleada de la limpieza causante del problema nunca se enterara ni de su error, ni de la forma en que se refirieron a la situación, aunque cabe suponer que algún empleado la vió y le pareció "justo" describirla como "topadora rompedora de fibras"... dando así nacimiento a la leyenda que hoy todos conocemos).

Así que tampoco me extrañó cuando el lunes pasado dejó de funcionar el ADSL en casa y cuando llamé al teléfono de reclamos de servicios ADSL domésticos (0800-1199), me contestó una grabación automática que decía algo así como "Estimado Cliente: En este momento la conexión internacional a Internet está siendo afectada por una falla técnica, bla, bla, bla...". Naturalmente que debió ser "otro" enlace internacional el que se les echó a perder, porque el resto de los ADSL empresariales, así como también todos los ISP que utilizan a AntelData como upstream provider podían seguir disfrutando de la navegación "internacional" de la cual nos vimos privados los usuarios de ADSL domésticos... aunque bueno, en realidad nos vimos también privados de nuestras direcciones públicas, así que iba a ser dificil acceder a cualquier cosa que estuviera geográficamente situada a más de -1.5 metros de nuestros modems...

Y si, la culpa es del enlace internacional. El muy malvado a veces causa estos problemas, talvés porque se cansa de los terabytes de películas, mp3 y pornografía que los usuarios consumen diariamente y a veces se empaca como mula (¿o como eMule?) y se niega a dar servicio a los ADSL domésticos, muy a pesar del resto de Internet, que ni siquiera se dá cuenta de estos desmanes.

Pero me quedo tranquilo, porque esto pasa en todas las empresas públicas, como cuando le echaron la culpa de aquel corte de luz general a un cazador que había disparado a un transformador y causado una sobrecarga que dejó con todo Montevideo a oscuras (aunque en realidad el problema fuera que se inundó la Central Batlle...).

Igual, tengo que decir que el servicio de ADSL ha sido hasta ahora bastante bueno, y mucho mejor que los servicios de otros competidores, incluso de los de la vecina orilla, quienes hacen sendos comerciales ("¡espidificate!" grita una locutora en off...) y cuando contratás el servicio te dan acceso a través de una IP privada y/o te obligan a usar un proxy para poder navegar...

Así que: ADSL, te queremos igual. ¡No cambies nunca! (por lo menos, NO para empeorar...).

EOF

martes, 15 de enero de 2008

Mas cerca de la regeneración completa de órganos

Ayer leí una noticia sobre un grupo de científicos que lograron regenerar un corazón a partir de la matriz de proteínas descelularizadas de otro corazón.

Sé que suena muy raro, técnico y hasta redundante (¿un corazón a partir de otro corazón?)... pero para que se entienda la importancia de este hecho, voy a tratar de explicarlo, según lo que dice el artículo original y algunos datos extra:

Un órgano cualquiera está formado por un conjunto de células especializadas, unidas por una matrix de proteínas, la cual mantiene la forma del órgano y evita que este se desmenuce en sus componentes (las células mismas). En el caso de los músculos, esta matriz (denominada matriz extracelular, o ECM) les dá a las células componentes de los mismos (las miofibrillas) algo de lo qué sostenerse y sobre lo que poder aplicar sus fuerzas.

La forma en que se organiza una ECM aún es un misterio, pero lo interesante de la misma es que si se la priva de las células contenidas en su interior, se conserva intacta, haciendo que sea posible "repopularizarla" con nuevas células.

El proceso de "descelurarización" de una ECM se hace en base a la inyección de ciertos detergentes que destruyen las células originales, pero deja intacta la estructura de proteínas que forma el órgano, permitiendo obtener un modelo tridimensional del mismo, como una especie de esqueleto (la fotografía es bastante elocuente).

Una vez que la ECM se obtiene, se puede inyectar con nuevas células (células madre, células progenitoras y células musculares de corazón), alimentarlas y la ECM se "repopulariza" con células especializadas y renovadas, obteniendo finalmente un corazón casi idéntico al original, pero "cero kilómetro".

Este nuevo corazón contiene células más resistentes que el corazón original, lo cual representa una mejora de gran relevancia y de increíble potencial. Además, dichos órganos, una vez que comienzan a ser estimulados (mediante electrodos, al igual que se estimula un corazón con un marcapasos), comienzan a bombear por sí mismos, y una vez quitado el estímulo, se mantienen bombeando solos durante varios días.

Aunque el logro parece magro (se requiere de un corazón preexistente para poder ser regenerado, debe ser "descelularizado" y no puede crearse uno partiendo de cero aún), las implicaciones del desarrollo de esta tecnología (unida a la investigación de las células madre) se vislumbra como un futuro proceso de rejuvenecimiento de órganos o de creación de nuevos órganos en base a estructuras pre-generadas mediante la aplicación de nanotecnología o cultivos de tejido moldeado.

El potencial de este descubrimiento es monumental, así que voy a seguirlo de cerca a ver si surge alguna nueva noticia al respecto.

Ya puedo imaginarme una escena como esta:

Paciente: "Hola, vengo para el chequeo de los 2500 millones de latidos..."
Doctor: "Bueno, póngase cómodo. ¿Quiere que le renovemos el leasing?"
Paciente: "Y si... ¿Vuelvo la semana que viene a cambiármelo?"
Doctor: "No se apresure, tiene apenas el corazón de un muchacho de 50 años"
Paciente: "¡Ja! ¡Y eso que la semana que viene cumplo 170!"

(Tomemos en cuenta que un corazón normal late aproximádamente unas 110.000 veces al día y que en unos 100 años ya habrá alcanzado aproximadamente 5.000.000.000 de latidos...)

Ahora solo falta avisarle a Eliseo Subiela que reedite "Lifting de Corazón" de nuevo, pero con un toque menos sensiblero y más científico :-)

¡Cambio y fuera!

martes, 8 de enero de 2008

Cruzada por el S.P.F.

He iniciado una (se podría decir que exitosa) cruzada para ayudar a implementar S.P.F. en los servidores de correo de los dominios más importantes de Uruguay.

En realidad, me cansé de recibir SPAM que decía venir de dominios como netgate.com.uy, internet.com.uy, montevideo.com.uy, redfacil.com.uy, etc. (mayormente, los dominios más conocidos de Uruguay), pero que en realidad eran ilegítimos (o sea, emitidos desde equipos que no eran los servidores legítimos instalados por los ISP para dicho menester), así que empecé a enviar mensajes a todos los ISP de la vuelta expresando mi idea al respecto y me alegro de que (junto con otras misivas que habrán recibido acerca del tema de parte de otros sysadmins) hayan dado fruto y que la mayoría de estos dominios haya implementado S.P.F. finalmente.

No puedo decir que es por mi causa que se empezó a implementar esta tecnología en dichos ISP, pero sé que hubo un "antes y un después" en estos servicios y me alegra creer que puedo haber aportado mi granito de arena.

Espero no haber hecho enojar a nadie (a ningún sysadmin le gusta que otro le diga que le falta algo o que está haciendo algo mal...), aunque traté de poner empeño en que los mensajes fueran lo más cálidos y amistosos posibles. Se trata de mejorar el servicio sin complicar las cosas y eso, por lo menos en esta ocasión, ¡es bueno, es fácil y es gratis!

Todavía me faltan algunos, pero en estos días sigo con mi campaña.

¡Enhorabuena sysadmins! :-)

lunes, 7 de enero de 2008

De vuelta online... inaugurando el 2008

No me van a creer, pero estuve un par de días fuera de línea, porque mi blog estuvo... ¡¡bloqueado por spam!!

Se extrañan las epocas en que el spam era una cuestión del correo electrónico solamente... pues claro, ahora uno puede generar un blog sin sentido, cuya unica utilidad parece ser propagar URL de contenido de dudosa calidad (¡como este blog! :-) ), y desde luego, un buen sistema de filtros como los de Google puede considerarlo excremento merecedor de ir a parar al basurero más grande que hay en el planeta (pensé que Internet YA ERA el basurero más grande del planeta...).

Y bueno, eso fué lo que paso... Me bloquearon el blog porque para los filtros de google, era evidente que el contenido del mismo era basura (¿se imaginan? YO, ¡que estoy contra toda esa peste del spam, termine en las "redes" del sistema!). Talvés fué porque publiqué demasiados artículos con la palabra "spam" adentro, o con la palabra "publicidad", o quién sabe qué... (No se me ocurrió pasar por el SpamAssassin el contenido del blog para ver qué puntaje le dá...).

La cosa es que me llegó un mail del administrador de Blogspot avisándome del problema, y tuve que pedir que revisaran de nuevo el asunto o me eliminaban el blog. No es que me importe demasiado, pero la verdad, me encariñé con él, y no me gustaría que mis palabras escritas fueran a parar al "grán disco duro en el cielo".

En definitiva, no pude postear nada nuevo... hasta hoy (bueno, en realidad me tomé una "semana sabática" del blog, esperando poder renovar energías, y sacarme de arriba algunos trabajos que se me atrasaron...).

Y bueno, aca estamos otra vez, escribiendo más basura para ver si vuelvo a marchar...
Si ven que tardo más de una semana en postear algo, no desesperen, ¡puede que haya caído nuévamente en el antispam de Google! :-)

 
Gustavo Castro

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