viernes, 1 de febrero de 2008

Maldita araña que no me dejas dormir...

No puedo explicar cómo funciona, pero lo que sí puedo decir es que puedo darme cuenta cuando una araña está cerca de mí mientras estoy durmiendo o en camino de dormirme. Me sucede desde que tengo uso de razón, al igual que los déjà vu casi contínuos que tengo ultimamente.

Sé que no hay explicación lógica, y la verdad estuve buscando en Internet algo "científico" que explique el porqué de esta especie de sensibilidad extraña que tengo hacia estos bichos (que considero harto desagradables), pero no pude encontrar nada serio.

En los años que tengo, muchas veces me ha pasado de levantarme de noche a buscar una araña que sé que está ahí, en algún lado, a una distancia menor a un par de metros de mi persona.

He analizado lo que pasa cuando siento eso y la realidad es que cuando hay uno de estos desagradables artrópodos cerca y estoy normalmente acostado preparándome para dormir, al cerrar los ojos veo imágenes vívidas y muy cercanas de diversas arañas. Cuanto más cerca y más grande es el ejemplar que "siento", más intensas son las imágenes, lo cual se torna pesadillezco y me obliga a levantarme y buscar al maldito bicho. En estado consciente (quiero decir, mientras deambulo por ahí), me ha pasado de percibirlas cuando su tamaño excede los seis o siete centímetros de diámetro, pero nunca si son apenas menores y aún en estos casos, no "veo" imágenes, sino que es como una especie de electricidad o estática en el cuerpo del lado donde está situada, una sensación única e inconfundible. Una vez que las encuentro (con la vista, claro está), la sensación se mantiene, pero es menos intensa y hasta desaparece después de un rato.

Hace dos noches que empecé a sentir de nuevo eso mientras estaba acostado en mi dormitorio, y como la araña no era muy "grande" o "cercana", las imágenes no me molestaron demasiado, pero anoche la cosa se puso peor y tuve que levantarme. La pobre araña no es la grán cosa, pero estaba detrás de mi mesa de luz, contra la pared, lo cual me confirma que lo de la noche anterior (y lo de otras incontables noches en también incontables otros lugares) es cierto y que sigo de alguna manera detectando a estos adorables animalitos. La quise atrapar para sacarla, pero escapó, aunque luego de ese episodio, pude dormir casi bien, talvés porque quedó fuera de mi "radio de detección". Esta noche me propongo intentar nuévamente sacarla y aunque no me gusta matar animales, no tengo aún una estrategia muy elaborada y que no incluya el uso de algún calzado ligero de verano como solución permanente...

¿De qué se trata esta sensibilidad a la presencia de arañas? No sé... Siempre me fascinaron estos artrópodos, y son el animal al que más miedo le he tenido alguna vez. Ahora, racionalizando todo esto, el sentimiento que tengo hacia ellas ha evolucionado, pero no dejo de sentir esa "cosa rara" ante la presencia de algunos ejemplares de tamaños interesantes.

Como dato adicional, les comento que la araña más grande del mundo, la Tarántula Goliath (Theraphosa Blondi) vive en zonas tropicales de América Central y del Sur, puede alimentarse de pájaros y pequeños roedores, puede llegar a medir unos 30 centímetros de diámetro y se defienden mediante unos pelos urticantes que lanzan desde su cola con las patas traseras, a pesar de poseer unos quelíceros (ponzoñas) de casi una pulgada de largo.



Normalmente, dependiendo de la especie de araña, la cantidad de ojos oscila entre cinco y ocho, lo cual a pesar de parecer intimidante tiene poca utilidad, dado que la mayoría de estos animales utiliza sus pedipalpos para captar olores, vibraciones en el aire o en las telas que crean para poder atrapar a sus presas y no ven nada bien con sus múltiples globos oculares. Las hay de esas que saltan, otras que caminan sobre el agua, o que cazan de noche (como el ejemplo de la foto). Anatómicamente hablando, el corazón está situado en la parte alta de la cola (por si uno tiene que batirse a duelo a la Samwise Gamgee contra Shelob...), tienen cerebros compuestos (básicamente centros nerviosos interconectados, pero primitivos) y suelen tenerle fobia a la luz. Viven desde algunos meses hasta décadas, dependiendo de la especie y todas mudan su piel contínuamente para poder crecer. Generalmente, la forma de alimentarse incluye la inyección de veneno para paralizar a la víctima, luego la inyección de jugos gástricos y luego la succión del resultado, lo cual imagino que debe resultarles delicioso...

Hay gente que las colecciona y que paga incluso miles de dólares para poder adquirirlas en el mercado negro, ya que algunas especies además de ser difíciles de conseguir, están protegidas por leyes debido a su potencial extinción.

Aquí les pongo una fotito del detalle de los quelíceros de una Tarántula Migala, la segunda más grande del mundo, para los que se preguntan qué tan interesante será una mordedura de estos lindos octópodos, los cuales tienen un temperamento bastante beligerante.



Y por último, para quienes tengan estómago para verlo, les dejo un enlace a un video donde una de estas arañitas se almuerza un ratón blanco: http://break.com/index/huge-spider-eats-mouse.html.

Aclaro que es un video muy poco agradable. ¡NO ACEPTO QUEJAS!

Ahora supongo que entenderán porqué les he tenido tanto miedo, aunque claro, no espero que sepan o entiendan porqué puedo sentirlas cuando están cerca, así que acepto que crean o no lo que se les ocurra. Pueden preguntarle a mis allegados y ellos les contarán la verdad, tal cual se las estoy contando ahora.

Y bueno, espero que la arañita que duerme detrás de mi mesa de luz se haya mudado o de lo contrario, talvés tenga que irse con las otras arañas que viven en el gran nido de arañas en el cielo.

Taluego!

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Gustavo Castro

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